Inicio / Crece en la fe / Novena bíblica a nuestra Señora de los Dolores octavo día I Amén Comunicaciones
Generic filters

Filtro

Novena bíblica a nuestra Señora de los Dolores octavo día I Amén Comunicaciones

¡Novena bíblica a nuestra Señora de los Dolores!
(incluye los 7 dolores de la virgen María)

novena a la virgen de los dolores - octavo dia

 

Iniciamos:

En el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.

«Ojalá escuchéis hoy su voz, no endurezcáis el corazón, siguiendo el consejo de
María, que nos dice: “Haced lo que Él os diga”.
R/. Venid, alabemos a María, la Virgen Dolorosa, que permaneció fiel junto a la
cruz de su Hijo.

Día octavo

Séptimo Dolor:

Jesús es colocado en el sepulcro (Lc 23,53-56)
“Y, bajándolo, lo envolvió en una sábana y lo colocó en un sepulcro excavado en la roca, donde nadie había sido puesto todavía. Era el día de la Preparación y estaba para empezar el sábado. Las mujeres que lo habían acompañado desde Galilea lo siguieron, y vieron el sepulcro y cómo había sido colocado su cuerpo. Al regresar, prepararon aromas y mirra. Y el sábado descansaron de acuerdo con el precepto”.

Una vez cerrada la tumba, y sellada, como era costumbre, María abandonó el lugar con su dolor y su soledad a cuestas.
En el secreto de su corazón, María oraba y en su oración callada pero ferviente, repetía una y otra vez su “sí” de Nazaret.
María no comprendía los hechos que acababa de presenciar, no entendía por qué Jesús, su Hijo querido, el Hijo del Dios Altísimo, había muerto así, en plena madurez, dejando a medio camino su misión de profeta del Señor; y tampoco entendía por qué su muerte había sido tan cruel, tan humillante; la muerte de un criminal.
María callaba…
María oraba…
María se entregaba nuevamente…
María creía…
Seguía creyendo a pesar de lo que había sucedido con Jesús.
María amaba…
Seguía amando a pesar de lo que le habían hecho a Jesús.
María esperaba… Seguía esperando a pesar del aparente fracaso de Jesús; de
Su profundo dolor de madre, de su inmensa soledad, del hondo vacío que sentía en su Corazón.
Sabía que Dios no defrauda a nadie, porque es el Dios del amor, el Dios del perdón,
el Dios de la Vida!

Plegaria a la Virgen de los Dolores

Virgen sagrada, María, Madre de nuestros dolores, nosotros, los pecadores,
somos causa de tu herida; pues, quitamos la vida, al Hijo de tus amores.

Y, tú, Madre dolorida, Que tanto sufres por mí, Clávame tus siete espadas,
y que sufra yo por ti.

Madre sagrada, María, Ayer Reina de las flores, hoy Madre de los dolores,
Traspasada y afligida.

Trono de sabiduría, enséñanos la virtud, para estar junto a la cruz
y sanar mi triste herida.

Sentir mi alma dolorida y el perdón de tu Jesús; Virgen sagrada, María, Tú, maestra de dolores.

Playa de los pecadores, nido en que el alma reposa; a Ti ofrezco, pulcra rosa,
las jornadas de mi vida;

A Ti, Madre, en quién quería cumplir mi humilde promesa, a Ti, celestial princesa, Virgen sagrada, María. Amén.

Un momento de silencio para hacer la petición…

Dios te salve, María, llena eres de gracia;
El Señor es contigo.
Bendita Tú eres Entre todas las mujeres,
Y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios,
Ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte. Amen

Dios te salve, María,
llena eres de gracia;
El Señor es contigo.
Bendita Tú eres
Entre todas las mujeres,
Y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios,
Ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte. Amen

Dios te salve, María,
llena eres de gracia;
El Señor es contigo.
Bendita Tú eres
Entre todas las mujeres,
Y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios,
Ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén

Oración final

¡Oh Virgen de los Dolores!
Madre de amor y de consuelo,
Ayúdanos en la vida y condúcenos al cielo.
Tú qué sabes como nadie de penas y sufrimientos,
acógenos como Madre y danos fuerzas y aliento.
Te pedimos por los que sufren, en el alma y en el cuerpo,
y recordando tu imagen, te ofrecen sus sufrimientos.
¡Virgen de los dolores, Ruega por nosotros! Amen

 

También puedes escuchar la novena haciendo clic aquí